martes, 12 de julio de 2016

Popurri dominguero ♥


El domingo el Olga se llenó de buena vibra por doquier, arte y risas 

Gracias a todxs lxs artistas que estuvieron en escena poniéndole el cuerpo y a todxs lxs que se acercaron a la movida.

Como Arte al ataque nos alegrea poder generar estos espacios donde lxs trabajadorxs de la cultura puedan mostrar lo que construyen día a día, desde la alegre rebeldía. Y mucho más en espacios como nuestro querido Olga Vázquez entre tanta clausura y ataque a la cultura popular. 

Que viva la cultura popular y autogestiva, que vivan lxs trabajadorxs de la cultura.. La revolución es imposible sin el arte! 

    

* Gracias a la grosa de Ayelén Rodriguez por las hermosas fotografías 


















sábado, 9 de julio de 2016

Pegatinas + Arde Closet #9


A 47 años de Stonewall
LA REVUELTA CONTINÚA!

Pegatinas // Mensajes en las paredes // Arde Closet #9 La Plata

El sábado 28 de Junio de 1969 se encendió la mecha, ese 28 de Junio se dijo basta a los abusos, la persecución y maltratos de quienes querían imponernos una cierta forma de ser, sentir, amar, vivir. Hace 47 años, en un bar llamado Stonewall Inn (Nueva York), Sylvia y Marsha – mujeres trans, travestis, una negra y otra puertorriqueña - fueron las que arrojaron las primeras piedras de las muchas que vendrían. Estaban en la primera línea y en avanzada y junto a ellxs lesbianas, putos y drag queens. Mientras la noche se iba prendiendo fuego, obligaban a la policía a retroceder mientras se corrían los bordes del patriarca y su heteronorma.

Durante los ‘60 las redadas eran algo frecuente, como así las golpizas y detenciones a todxs aquellxs que no se ajustaran a “la norma”. La comunidad LGBTTTIPQ había estado todo ese tiempo contenida por las líneas del Stonewall Inn pero después del 28 de Junio nada fue lo mismo. La rebeldía y resistencia florecieron del fuego, de los disturbios, de la revuelta que buscó terminar con la opresión, los abusos y el homolesbotransodio, donde se dijo basta y se perdió el miedo. Las manifestaciones continuaron, se tomó la palabra y se tomaron las calles con todos los colores del arcoiris para dar batalla al heteropatriarcado y hacer retroceder sus fronteras.

Pasaron 47 años desde aquella noche donde ardieron los closet y se hace necesario que la sociedad siempre conserve Stonewall. No como una mera fecha para recordar sino como una bandera bajo la cual seguir luchando contra una violencia sistemática que quiere controlar nuestros cuerpos, deseos, vida, sueños, gustos y rebeldía. Stonewall representa a quienes se resisten a ser asimilados por el sistema moral del patriarcado. Lxs que no ceden ante las presiones de las fuerzas represivas ni ante el discurso de la integración que el patriarca pretende ejercer sólo bajo sus propias condiciones; la sociedad del patriarcado no busca ampliar el territorio, busca asimilar lo ajeno.

Quieren reducir el Stonewall, quieren volver a meternos en los armarios, ponernos límites y fronteras… pero seguimos diciendo BASTA a este sistema patriarcal y machista que busca normalizar nuestros cuerpos cuando estos no responden al binomio biologicista “hombre-mujer”, que quiere imponernos un casillero; BASTA a la heterosexualidad obligatoria que se presenta como único fin. Repudiamos la cosificación de las personas y los estándares de belleza impuestos por los medios masivos de comunicación, que utiliza un discurso que invisibiliza, banaliza, estereotipa y perpetúa las categorías heteronormativas. BASTA a la policía de lxs cuerpxs! Decimos BASTA a un sistema educativo y de salud que discrimina, que excluye y estigmatiza las identidades autopercibidas, autoconstruidas. BASTA a un sistema capitalista que por un lado margina y cierra puertas empujando a travestis y trans al desempleo o la prostitución, y por el otro crea un mercado de consumo de una cultura gay-friendly trivial y meramente comercial.

BASTA a una policía, poder político y judicial que reprime, violenta, encarcela, criminaliza. Exigimos el desmantelamiento de aquellas redes de poder que colocan a travestis y trans en el último eslabón de una cadena de narcotráfico para luego justificar las requisas policiales donde se las violenta, discrimina y violan sus derechos amparados en la Ley de Identidad de Género. No queremos una Ley de papel, sino que su aplicación se dé en todos los rincones no para que se legalice el deseo o la autodeterminación, sino para que situaciones de violencia y discriminación no queden impunes.

Luchamos para que se respete nuestro derecho a construir, deconstruir y volver a construir nuestra identidad cuantas veces queramos como así de amar y besar a quienes se nos plazca. Peleamos para que el poder que pretende regular las identidades y los cuerpos, respete nuestra soberanía sobre los mismos y nuestros derechos reproductivos como así el derecho a acceder a un aborto seguro y legal tanto a mujeres como así a varones trans.

Luchamos y seguiremos luchando porque una vez que Stonewall Inn se prendió fuego ardió el heteropatriarcado. Y así como la comunidad LGBTTTIQP tiró hace 47 años la primera piedra, hoy seguimos revelándonos contra las fuerzas represivas del patriarcado y la heteronorma.

No queremos casilleros, no queremos una política de “integración”, no buscamos encajar, no queremos un discurso que “acepte” la diversidad mientras que por debajo de la mesa se busca criminalizar, estigmatizar, demonizar nuestra forma de vida, nuestros deseos, pasiones, cuerpos, identidades.

Reivindicamos la vida en la disidencia. Y mientras más personas quemen sus placares y mientras las raíces nacidas en Stonewall se fortalezcan y multipliquen, más se deja en evidencia que el verdadero closet que tiene que arder es esta sociedad patriarcal, capitalista, machista, misógina, heteronormativa y homolesbotrasodiante.

Porque orgullo es libertad y lucha. Orgullo es organizarnos contra la violencia institucional, mediática, religiosa, familiar, médica, policial, judicial y educativa que quiere imponernos una normalidad asquerosamente repulsiva. Orgullo es asumirnos como disidentes, rebeldes, revoltosxs, creadorxs (y creativos) de nuestra propia identidad. Orgullo es el fuego que incendia los closet y pinta un arcoiris en el cielo.

Stonewall sigue vivo y revulsivo. 
Basta de heterosexualidad obligatoria
Basta de homolesbobitransodio…
Ni una trans- travesti-torta-puto-bi menos - El heteropatriarcado MATA!
Aborto legal para lxs pibxs trans!
Implementación efectiva y ya del cupo laboral trans!
Justicia por Diana Sacayán!

LA REVUELTA CONTINÚA… FURIA TRAVESTI!!